Nos vamos de fiesta.
Mientras esperamos el día que zarpe el barco hacia Dubai, cruzamos a la isla de Qeshm. Pedaleamos hasta la aldea pesquera de Laft, en donde nada más poner el pie en el suelo, una mujer con la cara cubierta por el burqa, nos invita a su casa. Tras la cena nos proponen asistir a una aruzi (fiesta de pedida previa a la boda). A "mis chicas" las visten como princesas y en la caja de un camión nos vamos con toda la familia a la fiesta. A nuestra llegada me dirigen a una oscura sala donde los hombres fuman sus qalyan (pipas de agua). Mientras trato de entender y responder a sus preguntas, me muero de envidia al escuchar los cantos y risas que llegan de la fiesta de las mujeres. En esta ocasión, le tocará a Aurora junto con Mehrnaz disfrutar del país.
Al día siguiente en Bandar-e-Pol de nuevo otra aruzi. Tan acostumbrados a nuestro horario de sueño infantil... ahora le robamos horas al sueño. Pero la ocasión no se puede desaprovechar y servirá para poner un inmejorable broche a nuestra estancia en Irán.
Mientras esperamos el día que zarpe el barco hacia Dubai, cruzamos a la isla de Qeshm. Pedaleamos hasta la aldea pesquera de Laft, en donde nada más poner el pie en el suelo, una mujer con la cara cubierta por el burqa, nos invita a su casa. Tras la cena nos proponen asistir a una aruzi (fiesta de pedida previa a la boda). A "mis chicas" las visten como princesas y en la caja de un camión nos vamos con toda la familia a la fiesta. A nuestra llegada me dirigen a una oscura sala donde los hombres fuman sus qalyan (pipas de agua). Mientras trato de entender y responder a sus preguntas, me muero de envidia al escuchar los cantos y risas que llegan de la fiesta de las mujeres. En esta ocasión, le tocará a Aurora junto con Mehrnaz disfrutar del país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario